Perspectivas 2025

Resumen Ejecutivo

Las perspectivas para 2025 presentan un panorama mixto, donde los riesgos geopolíticos y las políticas monetarias de los bancos centrales jugarán un papel crucial. En nuestro escenario base, anticipamos un crecimiento moderado de la economía global con una inflación controlada, lo que favorece a la renta fija, especialmente por los esperados recortes de tasas de la Reserva Federal. Se espera un crecimiento de EE. UU. de 2.7%, Europa de 1.2% y Asia de 4.8%, con una inflación en EE. UU. de 2.3% y Europa de 2.5%.

En este escenario, la renta fija será un activo clave, adoptando una postura defensiva, mientras que los mercados de renta variable experimentarán retornos moderados, destacándose sectores como tecnología y energía renovable. China, por su parte, implementaría estímulos para estabilizar su economía.

Sin embargo, el escenario pesimista contempla una desaceleración significativa. Si los conflictos geopolíticos se intensifican, podríamos ver una contracción global, con EE. UU. creciendo solo un 1.5%, y Europa entrando en recesión. La inflación podría dispararse, afectando la estabilidad de los mercados. En este contexto, los activos de renta fija podrían ofrecer rendimientos mixtos, mientras que los mercados de renta variable enfrentarían correcciones severas, particularmente en el sector tecnológico.

Nuestro posicionamiento refleja esta visión balanceada: sobreponderamos la renta fija en un entorno de tasas más bajas, mientras que adoptamos una postura cautelosa sobre la renta variable, dadas las incertidumbres globales. En cuanto a los activos alternativos, mantenemos un posicionamiento neutral, esperando que la estabilización de la inflación favorezca el crecimiento de la economía global.

A lo largo del informe completo se detallarán estos escenarios y nuestras estrategias de inversión recomendadas, ofreciendo un análisis más profundo para tomar decisiones informadas en 2025.